Según se pudo saber , la Justicia sostiene que “no fue un hecho al boleo”, pero las hipótesis sobre trata de personas o secuestro extorsivo perdieron fuerza.
Este jueves se cumplieron diez días desde la desaparición de Guadalupe Lucero, la nena de 5 años que fue vista por última vez en la casa de su tía, en el barrio 544 Viviendas de San Luis, en medio de un festejo de cumpleaños familiar. Mientras continúan los rastrillajes en distintos puntos de la provincia puntana, los investigadores siguen recabando datos y tejiendo conjeturas sobre el caso.
Según se pudo saber la Justicia mantiene la mirada sobre el entorno de la menor, aunque no hay una pista firme. Hay una certeza: “No fue un hecho al boleo”, sostiene a este medio alguien cercano al expediente. Y, por otra lado, hay dos líneas de investigación que perdieron fuerza en las últimas horas: fuentes del caso descartaron a este medio que se investigue una hipótesis de trata de personas o un secuestro extorsivo.
De acuerdo a las fuentes, tampoco se sospecha de un esquema narco de criminalidad compleja, una de las teorías que surgió en el inicio de las pesquisas. Igualmente, se investiga cualquier posibilidad y la PROTEX, el ala de la Procuración dedicada a delitos de trata que interviene en desapariciones de personas, como en el caso de M., la menor secuestrada en la Villa Cildañez, examina los celulares e impactos de antenas.
Por otra parte, se determinó que las llamadas recibidas por Yamila Cialone, la mamá de Guadalupe, provenían de la provincia de Río Negro, pero se descartó que la niña estuviera allí. Así lo reveló el abogado de la mujer, Santiago Olivera Aguirre, que agregó que se realizaron procedimientos donde secuestraron los celulares e identificaron a las personas, pero aún no hay detenidos.
Este jueves la búsqueda prosiguió en la localidad de Potrero de los Funes, ubicada a 20 kilómetros de la ciudad capital. La policía provincial realizó rastrillajes allí con la colaboración de efectivos de Gendarmería y Prefectura que arribaron ayer a la provincia junto a dos canes rastreadores.
A la vez, un equipo de cuatro perros entrenados y ocho ex policías del grupo Halcón y Alianza canina hicieron lo propio en el barrio donde desapareció Guadalupe. Los mismos fueron contactados de manera particular por el padre de la niña, Eric Lucero, en busca de resultados en la causa.
El caso
El lunes cerca de las 17:30 Guadalupe se dirigió a la casa número 5 de la manzana “H” del barrio 544 Viviendas, al sur de la capital provincial, para celebrar junto a su familia el cumpleaños de su tía, que reside allí. Por la tarde, la pequeña y sus primos salieron a jugar a la calle.
“Cerca de las 19 terminaron de tomar la chocolatada y salieron a jugar. Eran todos sobrinos míos: tres varoncitos, Guadalupe, y la más chiquita, Emma, de tres años. En un momento salió Luana, otra de las tías de Guadalupe, para ponerles la campera a los chicos. Hasta ahí, estaba todo bien. Pero cinco minutos después Emma golpea la puerta y nos dice: ‘Guada no está’”, contó a C5N Georgina.
La abuela de Guadalupe, Silvia, señaló luego que las pequeñas estaban jugando a “las escondidas” en la calle cuando la niña desapareció: “Guadalupe se esconde y Emma, con sus tres años, se pone a contar. Se enoja porque no la encuentra y entra a la casa y dice: ‘Guada no está’. Yo salgo afuera, grito su nombre y no me responde. Vuelvo a entrar y les digo a los demás ‘Guadalupe no está’ y ahí salimos todos a buscarla”.
Al ser consultada por sus familiares sobre lo sucedido, la pequeña Emma dijo que Guadalupe se había ido con una mujer de características físicas similares a las de otra de sus tías, que tiene 20 años. Esta es la principal hipótesis sobre la que se basan los investigadores para realizar la búsqueda de la niña. Inmediatamente, la familia salió a buscar a Guadalupe y dio aviso a la Policía.
Georgina contó a Infobae que dos testigos brindaron un dato a la Policía que podría ser clave para la investigación. Según su relato, el lunes por la noche, cerca del horario en el que desapareció Guadalupe y a pocas cuadras del lugar del hecho, vieron caminando a una niña cuyas características físicas coincidirían con las de Guadalupe, junto a una mujer. Esta información coincide con el aporte de la pequeña Emma, quien dijo que su prima se fue acompañada por una adulta.